Los departamentos de Recursos Humanos cada vez están más habituados a la figura del intraemprendedor. Sin duda, una opción para retener talento en las empresas.
Lamentablemente, muchas empresas se preguntan cómo evitar la fuga de talento en sus empresas. Se enfrentan a una realidad en la que los trabajadores no solo tienen en cuenta el salario, sino la flexibilidad, el ambiente de trabajo y la política de la empresa.
En este sentido, los responsables de Recursos Humanos necesitan poner en marcha acciones y planes para cuidar del talento y atraer a los mejores. Una de las maneras para hacerlo consiste en la figura del intraemprendedor, que se está imponiendo en grandes empresas.
El intraemprendedor es un trabajador asalariado con una alta autonomía y capacidad creativa que pertenece a una empresa. Su trabajo se centra en generar ideas, iniciativas y propuestas orientadas a crear oportunidades de negocio.
A diferencia de lo que haría un emprendedor o autónomo, el intraemprendedor trabaja con el objetivo de conseguir beneficios para la empresa. En la actualidad, es un modelo que tiene variables y puede experimentar cambios de una empresa a otra. En algunos casos se contempla que el intraemprendedor asuma riesgos y bonificaciones en función del resultado del proyecto o la oportunidad de negocio generada.
Lo que sí tienen en común estos profesionales es una visión de negocio sólida y un fuerte compromiso con la empresa. Precisamente por esto son motivadores naturales de otros empleados, alientan y animan a que sus compañeros alcancen sus metas y objetivos propuestos. Con lo cual se trata de una fórmula novedosa con la que conseguir retener el talento (el del propio intraemprendedor) y el del resto de la plantilla de trabajadores.